Laird ha anunciado el lanzamiento de su nueva antena de banda ancha para techos de perfil ultra bajo CFSA Low Passive Intermodulation (PIM), de la cual afirma que es la más pequeña y delgada de la industria, con un espesor de tan sólo siete milímetros. Presenta una forma esférica, entregando un excelente rendimiento y fiabilidad.
Ha sido pensada tanto para su uso en infraestructuras públicas como hoteles y aeropuertos, como en otras como edificios de apartamentos, ofreciendo una cobertura omnidireccional.
Irradia una señal que, en interiores, es un 20% más eficiente que otras antenas DAS (Distributed Antenna System), mejorando las telecomunicaciones en el interior de los edificios y entregando una conectividad a Internet consistente y fiable, posibilitando con ello los desarrollos de la Internet de las Cosas (IoT).
Las previsiones para el 2020 son que una mayoría de los dispositivos conectados a la EIoT (Enterprise Internet of Things) lo sean en interiores de edificios u oficinas, ya sean hoteles, oficinas, hospitales, universidades, museos o centros comerciales entre otras ubicaciones.
Es por ello que esta antena de banda ancha para techos de Laird proporciona un patrón de cobertura optimizado para cumplir con los requisitos de interior a 698-960 MHz y 1.350-4.000 MHz, soportando las bandas de frecuencias globales GSM, DCS, UMTS, AWS-3, y 3G/4G-LTE/WiMAX.
Presenta una impedancia nominal de 50 ohmios, con una polarización lineal horizontal, una potencia máxima de 50 W (a 25 grados centígrados de temperatura ambiente), un peso de 230 gramos, y un radomo PC, UL94-V0. Su temperatura operativa va desde los -30 hasta los +70 grados centígrados.
Instalando la antena de banda ancha para techos
Es importante mencionar que también cuenta con una estética que facilita su integración en cualquier entorno ya que resulta casi invisible por el formato que tiene, y podemos utilizarla aplicada a small cells.
